Hace unas semanas me invitaron a conocer Sisley. La cita fue en las mismas oficinas que la marca tiene en Madrid. Un ático en pleno centro de la ciudad con unas vistas maravillosas. Por supuesto, conocía la marca Sisley pero es cierto que no había probado muchos productos y sobre todo no conocía apenas nada de su historia.
Se trata de una empresa familiar que nació en 1976. Una de las máximas de Sisley es la calidad, se elaboran todos los productos con las mejores materias primas naturales y no salen a la venta hasta que no comprueban que los resultados son 100% los esperados. Por eso, sus procesos de elaboración son larguísimos pero así evitan todo tipo de reacciones en la piel y se aseguran que sus productos van a ser un éxito. En cosas como ésta se entiende la denominación de «cosmética de lujo».
Sisley cuenta con 3 líneas de productos. Por un lado la del cuidado de la piel con todo tipo de cremas tanto para el rostro como para el cuerpo, e incluso protectores solares. Y por otro lado maquillaje y fragancias.
Nos presentaron Supremya Baume, una nueva versión de la clásica Supremya pero indicada para pieles secas y muy secas, que necesitan una buena hidratación. Esta crema se debe aplicar por las noches, ya que compensa los daños que sufre la piel durante el día y la prepara para hacer frente al estrés oxidativo del día siguiente. De este modo se retrasan los efectos visibles del envejecimiento intrínseco de la piel, gracias al fitocomplejo LC12 (Longevity Concentrate 12h) patentado por Sisley: una potente combinación de cuatro activos vegetales que aumentan la calidad de vida de las células y ayudan a mantenerlas intactas en el proceso de renovación.
Durante la presentación tuvimos la suerte de probar en primicia «Soir d’Orient», la nueva fragancia de mujer de Sisley que saldrá a la venta en septiembre. Os adelanto que tiene un olor penetrante y exótico, ya que está inspirado en las esencias de las plantas que se encuentran en el Alcázar de Sevilla como la nota de Celinda, una flor blanca, sencilla y singular que invade con su olor al atardecer. Además, su frasco es muy elegante y recuerda perfectamente a este monumento.
También aprovechamos para conocer más sobre el maquillaje de Sisley. Nos prepararon una clase en la que pudimos ver el paso a paso de un buen maquillaje. Al igual que con la línea de cuidado de la piel, el maquillaje de Sisley está elaborado con los mejores materiales a base de plantas combinados con la tecnología más vanguardista para conseguir no solo color sino también hidratación.
La verdad es que fue un placer poder adentrarme un poco más en una marca de lujo como Sisley. Además, ya he empezado a probar algunos de sus productos y son una auténtica maravilla.
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